La desaparición de Lucky: un perro secuestrado por las denuncias de un policía
El 11 de noviembre de 2024 se llevaron a Lucky, una mezcla de pastor alemán y fronterizo de un año y medio de edad, de su casa en Navata (Alt Empordà). Los testigos informaron haber visto a dos personas en una camioneta azul entrar en la propiedad y llevarse al perro. Desde el principio, los propietarios sospecharon de un vecino que se quejaba con frecuencia de los ladridos del perro. Ese vecino, un agente de la policía municipal de Banyoles, negó cualquier implicación.

Tras meses de investigación, las autoridades confirmaron el 12 de febrero de 2025 que el agente supuestamente había orquestado el robo y le dio instrucciones a un conocido para que se llevara al perro. Este conocido, junto con su yerno, ejecutaron el plan. Los Mossos d'Esquadra han detenido a la persona que se llevó físicamente al perro y han presentado cargos penales contra el policía y su cómplice.
La evidencia conduce a arrestos
Las imágenes de las cámaras de seguridad y los informes de los testigos llevaron a los investigadores a rastrear la camioneta y a su conductor. Al registrar el vehículo, las autoridades descubrieron la etiqueta de identificación de Lucky y rastros de su pelaje, lo que confirmó la conexión. El principal sospechoso, un hombre de 29 años, fue detenido pero se negó a cooperar con las autoridades. Investigaciones posteriores revelaron que el robo habría sido encargado por un agente de policía de Banyoles, de 42 años, que había contratado a un operador de grúa de 51 años para que lo llevara a cabo.
Protesta pública y búsqueda continua de Lucky
El caso ganó popularidad rápidamente en las redes sociales, y la etiqueta #JusticeForLucky fue tendencia cuando los ciudadanos exigieron respuestas. Activistas por los derechos de los animales y simpatizantes locales organizaron protestas para instar a las autoridades a intensificar la búsqueda del perro desaparecido. Mientras tanto, los propietarios de Lucky denunciaron haber recibido llamadas telefónicas amenazadoras, supuestamente de uno de los sospechosos.
A pesar de los arrestos y los procedimientos legales, Lucky sigue desaparecido. La policía continúa siguiendo las pistas para localizar a la mascota robada y determinar si fue vendida, reubicada o dañada.

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