Hombre de Florida y su perro asesinados por un oso negro en el primer ataque fatal en la historia del estado

Un trágico descubrimiento en el desierto de Florida

Robert Markel, residente desde hace mucho tiempo en Jerome, Florida, fue denunciado como desaparecido por su familia después de descubrir señales de una posible perturbación de la vida silvestre en los alrededores de su propiedad. La Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC) confirmó el 10 de mayo de 2025 que tanto Markel como su perro habían sido asesinados por al menos un oso negro.

La sombría cronología

El ataque ocurrió cerca de Ocean Boulevard y Lawton Street. Los restos de Markel se encontraron aproximadamente a 100 metros de su casa, junto con pruebas de un encuentro violento con un oso. Cerca de allí, también se descubrió el cuerpo de su perro, lo que indica que también había sido víctima del mismo animal.

Las autoridades observaron señales físicas de la entrada de un oso a la casa y confirmaron que el perro había muerto cerca de la residencia de Markel.

Osos capturados y asesinados

Los agentes de la FWC respondieron rápidamente. Entre el lunes por la noche y el martes por la mañana, tres osos negros machos adultos, cada uno con un peso de entre 207 y 434 libras, fueron localizados y sacrificados por motivos de seguridad pública. Un cuarto oso fue capturado, pero escapó. Se recogieron muestras de ADN del lugar y de todos los animales capturados.

Los resultados de la necropsia mostraron que el oso de 263 libras había ingerido restos humanos. El ADN encontrado en el estómago del oso y en el perro confirmó que este oso específico fue el responsable del ataque mortal.

El primer ataque mortal de osos en Florida

Este incidente no tiene precedentes en la historia de Florida. Si bien los encuentros con osos son relativamente comunes (se reportan más de 6,000 llamadas al año), esta es la primera víctima mortal. Desde la década de 1970, se han producido 42 incidentes de contacto físico entre humanos y osos negros en Florida, y hasta ahora solo tres han provocado lesiones graves.

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Una comunidad de luto

La FWC y las fuerzas del orden locales han permanecido en el lugar y en contacto con la familia durante toda la investigación. Las autoridades enfatizan que los residentes nunca deben intentar enfrentarse a la vida silvestre y siempre deben llamar al 911.

«Fue un hecho trágico e insondable», dijo el presidente de la FWC, Rodney Barreto. «Nuestros corazones están con la familia y elogiamos el profesionalismo y la compasión de nuestro equipo».